En conmemoración del 24 de Marzo, Día Nacional por la Memoria, la Verdad y la Justicia, la Universidad Provincial de Córdoba realizó una serie de actividades, con amplia participación de la miembros de esta casa  y la comunidad en general.

En ese marco, y como parte de las actividades programadas, el martes 22 de marzo, en el ingreso del Teatro de la Ciudad de las Artes -Campus Sur- de la Universidad, se realizó la presentación e inauguración de la obra “Sombras, ronda nocturna de los santos inocentes”, del artista Pedro Pont Vergés, donada a esta institución  por la familia Bertona y Pont Vergés.

Pedro Pont Vergés (1924-2003) fue un artista de destacada trayectoria que se formó en Córdoba. Su obra forma parte de colecciones privadas, de museos nacionales y del exterior. Siempre comprometido con su tiempo, consideró al arte como “una gran memoria, una gran conciencia que se va formando a lo largo de la historia”.

Su preocupación por lo social y aguda observación se evidencia en la pintura Sombras, ronda nocturna de los Santos Inocentes de 1998, que a la manera de un retrato de grupo, instala en la escena principal a víctimas de la injusticia, la violencia y la represión en Córdoba: Juan Bialet Massé, Atilio López, Agustín Tosco, Alfredo Curutchet, René Salamanca y Alberto Burnichón. En el primer plano iluminado por uno de ellos, el artista incluye a Martita Stutz y a un niño limpiavidrios. El conjunto se potencia al representar en un todo, una marcha en la que figuras anónimas y sufrientes, reclaman desde las sombras del olvido.

En la inauguración, hicieron uso de la palabra la Rectora de la UPC, Lic. Raquel Krawchik, quien destacó “…el rol de universidad pública en la tarea de promoción de los derechos humanos, como uno de los principios rectores de la educación en democracia, en libertad y con espíritu crítico…”;  y Ana Luque de Pont Vergés, viuda del artista, quien agradeció la posibilidad de “exponer la obra en esas paredes, lo que permitirá resignificar este espacio, llenándolo de nuevos contenidos… y que, ante los ojos de los estudiantes, se podrá mantener viva la obra… manteniendo la memoria por la paz, las ideas y la igualdad…”

Participaron de la ceremonia familiares de Pont Vergés; familiares de quienes están retratados en la obra; Jaime Díaz Gavier, Juez Federal y Profesor Honorario de la UPC; autoridades de la universidad y sus facultades; estudiantes y docentes.

Por otra parte, el día miércoles 23 de marzo, en la explanada de ingreso a la Escuela Superior de Bellas Artes Dr. Figueroa Alcorta, de la Facultad de Arte y Diseño, también en Ciudad de las Artes, se inauguró el emplazamiento de la escultura “El Grito” de Mario Rosso, obra  también donada a la universidad por la familia del artista.

Mario Rosso (1923-2014), nacido en General Cabrera, tiene una extensa y destacada obra. Como escultor monumentalista realizó obras de gran importancia en Córdoba e Italia. Fue docente de Escultura, durante más de 30 años, en la Escuela Superior de Bellas Artes Dr. Figueroa Alcorta, donde hoy se instala su obra.

El Grito, fue concebida como testimonio de los horrendos padecimientos sufridos por la familia argentina durante esa nefasta época. El gesto de la mujer, aterrada elevando un manto en actitud de defensa contra la agresión por parte de las fuerzas represoras, pretende simbolizar el grito de una nación impotente ante la violencia ejercida por parte del estado.

Rosso, como docente, fue muy impactado por la detención y desaparición de alumnos, personas muy allegadas y queridas. Y es así como la temática ocupó un importante período de su producción en los últimos años, de la que El Grito constituye su culminación.

Participaron del acto Roxana Singer, viuda del escultor, sus hijas, nietos, bisnietos, amigos y colegas, la Rectora de la universidad, decanas de las facultades, autoridades universitarias, personal del Polo Cultural UPC, estudiantes y docentes.

Roxana Singer manifestó: “…consideramos altamente significativo que esta escultura se encuentre emplazada hoy en este jardín que fue antes predio militar… frente a nuestra querida Escuela Figueroa Alcorta donde pasó (Rosso) años de su vida tratando de revelar, con una generosidad sin límites, los secretos y los misterios del oficio del escultor, con la sola intención de dotar a sus alumnos de las herramientas necesarias para emprender sus propios caminos, sus propios trayectos, resignificando así cada día el compromiso de un verdadero maestro, es decir, el compromiso de formar, de educar para la libertad. Mario estaría muy feliz hoy. El Grito ha encontrado su lugar”.

Al finalizar el acto, la Rectora enfatizó sobre la importancia de mantener viva la memoria, conocer nuestra historia reciente de dolor, desapariciones y terrorismo de estado que impuso la última dictadura militar, así como los juicios que en democracia pudimos concretar a esas mismas juntas militares, nos hace mejores como pueblo. Esta Ciudad de las Artes no es la misma con ambas obras, y seguramente cumpliremos el compromiso en tanto institución pública, de educar en la verdad, la memoria y la justicia.

Ambas obras, Sombras, ronda nocturna de los Santos Inocentes y El Grito, se exhibirán como expresiones de memoria para que Nunca Más se violen los Derechos Humanos; y recibirán a estudiantes, docentes y  visitantes, donde fuera el Batallón Militar 141, hoy Ciudad de las Artes, espacio dedicado al arte y a la educación, sede de la Universidad Provincial de Córdoba.